El escándalo femenino de Assassin's Creed Unity fue muy exagerado

Ubisoft hizo una gran revelación en el E3 y no tenía nada que ver con la jugabilidad: una vez planeó tener personajes femeninos jugables en Assassin's Creed Unity, pero los abandonó debido a varias razones. En un principio, se alegó que se debía a restricciones de producción o problemas con los recursos, y después se dijo que simplemente tenía más sentido narrativo tener un reparto exclusivamente masculino en el juego cooperativo.

Esto ha suscitado MUCHOS comentarios, de periodistas, desarrolladores y público, con todo un espectro de opiniones que van desde afirmar que esto es totalmente sexista y contribuye a la cultura de la violación (y un montón de otras palabras de moda de linchamiento en línea) a los que dicen que cualquiera remotamente molesto por esto es un idiota caballero blanco, que también es el líder de la brigada de la corrección política.

Como en la mayoría de los casos de opiniones divergentes, ninguno de los dos bandos extremistas, especialmente los que recurren a insultos, tiene razón. No cabe duda de que hay motivos para preocuparse por las acciones de Ubisoft, pero no son ni mucho menos tan graves como se afirma y, de hecho, Ubisoft es uno de los mejores estudios en lo que respecta a la representación en sus juegos.

Así pues, ahora que la polémica se ha calmado un poco y los ánimos se han calmado, veamos los distintos aspectos de esta historia y analicemos cuál es el verdadero problema y qué podemos hacer en el futuro para resolverlo.

El hecho de que Ubisoft haya hecho un juego sin personajes cooperativos femeninos, no es sexista

No es sexista hacer un juego en el que no haya mujeres. Lo mismo que no es sexista pintar un cuadro en el que sólo aparezcan hombres o cantar una canción dirigida a ellos: cuando se trata de arte, puedes hacer lo que quieras, es tu visión artística. Si crees que tu público objetivo quiere jugar como hombres y quieres hacer una historia sobre hombres, deberías poder hacerlo sin meter con calzador a una mujer porque, de lo contrario, podrías meterte en problemas.

En todo caso, si se empieza a incluir a las mujeres en los juegos más a menudo (y lo harán después de este escándalo), debería ser por razones legítimas, no sólo para complacer a unos periodistas enfadados.

Entraré en la semántica de este argumento en un minuto, pero si vas a llamar sexista a alguien, necesitas tener mucho más argumento que "en tu juego no hay mujeres". Tiene que haber alguna intención detrás para que sea realmente sexista.

Ubisoft es en realidad uno de los desarrolladores más progresistas en lo que respecta a la inclusión

La gran razón por la que mucha gente quiere juegos con protagonistas más diversos es doble: 1: es mucho más interesante jugar desde perspectivas diferentes, al fin y al cabo para eso jugamos; y 2: a la gente le gusta jugar a juegos en los que se siente representada. Yo tengo la suerte de ser un joven blanco con la cabeza rapada, así que encajo en todos los juegos, pero a veces estoy seguro de que a muchas mujeres les gustaría jugar a un juego con un personaje femenino, o a un negro con un personaje negro. Si no existe esa opción, quizá no sea mala idea crear juegos con protagonistas más diversos.

Curiosamente, Ubisoft ya ha hecho muchas cosas así en el pasado. Incluso combinó las dos cosas y creó una mujer negra para su juego Assassin's Creed: Liberation. Puede que fuera un título portátil, pero también ha tenido personajes femeninos fuertes en otros juegos de AC, como Mary Reed y Anne Bonny.

También acaba de lanzar Child of Light, con una joven como protagonista. South Park: Stick of Truth te permite personalizarte a tu antojo. Sí, voy a tener que remontarme un poco más atrás para encontrar a alguien que no sea blanco en un juego de Ubisoft (no cuento los juegos de los pitufos), pero la cuestión es que, en comparación con muchos otros desarrolladores/editores, Ubisoft es bastante inclusivo.

La eliminación de los personajes cooperativos femeninos apenas afecta al juego.

Los personajes femeninos jugables de Assassin's Creed Unity eran desechables, y esa es en parte la razón por la que se abandonaron tan rápido. Todo lo que iban a ser eran avatares sin voz con los que ver a otras personas jugando durante el juego. Tú, como personaje principal, seguirías siendo Arno, lo que significa que cualquier otra persona del modo multijugador con la que estuvieras jugando también se vería como Arno. Literalmente, la única vez que se planeó que las mujeres aparecieran como personajes jugables fue como skins de los otros jugadores, para que no todos corrieran por ahí como clones.

La asesina fue diseñada inicialmente para evitar que los jugadores perdieran la inmersión debido a que todos parecían iguales. A juzgar por las imágenes del juego, parece que Ubisoft ha abandonado esa idea, ya que todas las asesinas encapuchadas tienen un aspecto casi idéntico. Es una lástima, porque la mezcla habría quedado muy bien.

Pero eso es todo. Quitarlas no aportaba nada a la jugabilidad, la historia o la progresión de los personajes. Incluir a las mujeres en ese tipo de papel desechable para apaciguar los ánimos debería ser casi tan insultante como no incluirlas en absoluto.

Las malas relaciones públicas se llevaron la peor parte

La mala gestión de las relaciones públicas de Ubisoft fue la causa de la mayoría de los problemas que rodearon este escándalo. Si no se hubiera hablado de los personajes femeninos de forma tan displicente, no habría sido ni remotamente un problema. Si no hubiera mentido y dicho que llevaría meses de trabajo implementar un personaje femenino, quizá no hubiera sido tan grave. Si nunca se hubiera hablado de personajes femeninos en el juego, no habría pasado nada.

En cambio, tuvo que retroceder y retroceder y cada vez parecía peor.

¿Cuál es el gran problema?

Si Ubisoft es en realidad una empresa bastante buena para este tipo de cosas (no con el ordeño previo al pedido, pero esa es otra historia) y los personajes femeninos nunca debieron ser una parte importante del juego y si el arte es tan intocable y personal como una representación de la industria en la que habita, entonces seguramente todos deberíamos callarnos e irnos a casa.

Pues no tan rápido.

La industria del videojuego se enfrenta actualmente a una problemática situación en la que se enfrentan el huevo y la gallina:

Los editores de videojuegos miran los juegos más vendidos del año y ven hombres blancos de treinta y tantos años en todos los papeles principales, así que se aseguran de que sus juegos principales con los mayores presupuestos (que no pueden fallar o la empresa probablemente se hundirá) tengan hombres blancos de treinta y tantos años como protagonistas. Así que los jugadores compran esos juegos, porque son los más grandes y los más malos, y he aquí que el ciclo se repite.

A medida que más mujeres ocupen puestos de poder en el sector, es posible que esto empiece a cambiar, pero alguien tiene que romper el ciclo y decirlo, así que aquí va:

No me importa jugar como mujer.

No voy a exigir a nadie que haga un juego sobre un personaje que no quiere hacer. Eso no lo decido yo, lo decide el "artista" que está detrás de todo (y sin duda la persona con el dinero detrás), pero lo diré alto y claro, no necesito ver una versión ligeramente mayor de mí corriendo por ahí para conectar con ese personaje.

Demonios, sentí más por el personaje cuando jugaba como la silenciosa Chell en Portal II que en la mayoría de los juegos. Lo mismo con Lee en The Walking Dead, o Faith en Mirror's Edge. Y ni siquiera me parecía a ellos, raro, ¿verdad?

Así que no, nadie debería ser despedido por esto; no, nadie debería firmar una petición exigiendo que cambien el juego; y no, Ubisoft no debería ser señalada, ya que está lejos de ser el peor desarrollador que existe.

Pero deberíamos dejar claro que no nos importa jugar como un personaje diferente de vez en cuando. En serio desarrolladores y la gente que les paga y mueve los hilos, yo y muchos jugadores como yo, disfrutamos mucho jugando como personajes diferentes.

Incluso me gusta interpretar a personajes que no fueron diseñados pensando en mí. Sólo porque sea una protagonista femenina, no necesito que sea lo que la industria considera sexy. No necesito que el negro hable como un robot de Transformers. Que sean personas. Me gustan las historias y los juegos sobre personas, y a todo el mundo le gustarían si dijeran la verdad.

Y en cuanto a los que piensan que esto es un post de caballero blanco e indicativo de que lo políticamente correcto se está imponiendo, recuerden que probablemente a ellos también les encantarían estos juegos, sólo que aún no han tenido la oportunidad de jugarlos.

Autor: Jon Martindale