Windows 11 sigue muy por detrás de Windows 10 en cuota de mercado

Han pasado dos años desde el lanzamiento de Windows 11 y, a estas alturas, era de esperar que hubiera superado en popularidad a su predecesor, ¿verdad? Pues resulta que no. Windows 11 está significativamente por detrás de la versión anterior de Windows, Windows 10, en la tasa de adopción, según las estadísticas de StatCounter.

El análisis de StatCounter mide todo el mercado mundial e incluye casi todas las versiones de Windows de las dos últimas décadas. Sí, todavía hay gente que usa Windows XP, aunque se trata de un segmento muy reducido.

Windows 10 ocupa el primer puesto, con un enorme 71,64% de todo el mercado de dispositivos Windows. Windows 11 se queda a una distancia considerable del segundo puesto, con sólo 23,61%. Como era de esperar, con más de 95% del análisis, las demás versiones de Windows se disputan las migajas. Windows 7 presenta una buena batalla, con 3,34%, mientras que Windows 8.1 tiene 0,61% y Windows 8 0,35%. Windows XP, como se había prometido, sólo representa 0,34%. Las últimas versiones de Windows no mencionadas, Vista y 2003, sólo ocupan 0,1% entre las dos, lo que las hace estadísticamente irrelevantes.

Es lógico que a Windows 11 le haya costado hacerse un hueco en el mercado. Microsoft decidió cambiar el menú de inicio y la barra de tareas, lo que provocó muchas críticas de los usuarios. También ha perdido algunas de las funciones de Windows 10 y, lo que es más confuso, Microsoft ha decidido que el sistema operativo dependa de un módulo de plataforma de confianza (TPM), lo que supone un requisito anormalmente alto para un sistema operativo. Así que para muchas personas, puede que no sea que no estén dispuestos a cambiar, puede ser que no puede.

Sin embargo, para aquellos que son capaces de cambiar a Windows 11 y han optado por no hacerlo, es muy probable que los cambios en la interfaz sean lo que está desanimando a la gente. A pesar de que Windows 11 ha mejorado mucho desde su lanzamiento, las primeras impresiones importan, y es probable que el nuevo sistema operativo de Windows pase apuros durante algún tiempo. Es una reminiscencia de la recepción que tuvo Windows Vista en su lanzamiento, y muchos años después, con más de tres veces el número de personas que siguen prefiriendo el antiguo XP sobre Vista, está claro que la primera impresión todavía dura.